Por experiencia podemos decirte que hoy en día hay muchas opciones para llevar una vida más cercana a ser libre de plástico, pero esto no quiere decir que hacer el cambio sea fácil, pues se trata de cambiar hábitos, y si lo has intentado antes, sabes que requiere esfuerzo y consciencia diaria, sin embargo, los beneficios son enormes y la satisfacción de saber que aportas a salvar el planeta, es indescriptible.
- Arma tu kit de envases y bolsas reutilizables, no es necesario que compres, puedes hacer bolsas con ropa que ya no uses, reutilizar refractarios de algo que hayas comprado, pero ten en mente que debes tener a la mano y listo lo que usualmente necesitas cuando haces compras que impliquen plástico, (Termo, refractario, varias bolsas).
- Selecciona tus compras de manera inteligente, ¿Qué necesito o quiero comprar?, ¿En dónde puedo conseguirlo a granel?, ¿Puedo sustituir por productos sin empaque? Haciéndote estas preguntas, encontrarás que hay muchos productos que puedes dejar de comprar sin empaque, por ejemplo: shampoos, acondicionadores, cremas, jabones multiusos, jabones corporales, fibras para trastes.
- Si no puedes evitar el empaque, busca que sean empaques reutilizables como el vidrio o aluminio y ponte creativ@ en darle usos.
Sabemos que es un cambio que va poco a poco, pero este movimiento te invita a intentarlo, no a ser perfecto, si no, consciente de la cantidad de basura y plástico que desechamos todos los días, cuando hay opciones para evitarlo.